Si te contara lo que hago para sentirme bien y lo hicieras mañana es posible que acabaras deprimido o deprimida. Como quiero que este comentario sea útil para ti, te contaré lo que puedes hacer para sentirte mejor. Como depende de la situación inicial en la que te encuentres, puede que no te ayude de mucho, pero así todo, lo intentaré.

Haz todo lo que te haga sentir bien o lo que te hacía sentir bien antes de sentirte mal. Así tendrás más opciones. No te fuerces, deja que poco a poco lo que haces tenga su efecto en tu cuerpo. Entre todo lo que yo hago a diario, te voy a contar lo que te sentará bien si eres capaz de hacerlo. Sal a la calle todos los días y haz algo de ejercicio físico. No es necesario que sea intenso, incluso puede ser mejor que no lo sea. Yo paseo por la mañana y por la tarde porque tengo dolor crónico y es lo que mejor sienta a mi cuerpo. Si no tienes una rutina, la puedes construir poco a poco haciendo las cosas que te hacen sentir bien. Mucho de lo que te gusta y nada de lo que te disgusta o hace daño. Si estás mal, es muy posible que no tardes mucho en empezar a sentirte mejor. Véte a la cama todos los días a la misma hora. Evita actividades estimulantes en las horas finales del día. Relaciónate a diario con personas con las que te sientas bien. Amigos, familiares o compañeros de trabajo. Dedícate mucho tiempo a ti mismo sin ningún límite. Si sientes que necesitas estar solo o sola, házlo. No pienses en hacer lo que hacen los demás porque a ti puede que no te sirva para nada. Haz lo que tengas ganas de hacer. Intenta mantener una buena relación con el mayor número de personas, pero sin dar más de lo que te cuesta. Dáte pequeños placeres diarios porque te mantendrán con un buen estado de ánimo general. Busca cosas que te hagan sentir bien si todavía no las has encontrado, la única manera de descubrirlas es probar y probar. Haz pequeños esfuerzos si ves que no hacerlos empeora tu situación pero ten en cuenta que la solución definitiva a tus problemas no suele estar en el esfuerzo. 

El sexo, el chocolate y el amor ayudan. Lo hacen de diferente manera, pero lo hacen. Preocuparte por los demás ayuda también mucho. Divertirte es fundamental. Disfrutar con lo que haces es necesario. No romperte la cabeza por nada en particular es clave. No pensar mucho en el mañana ayudar a reducir mucho el estrés. Elegir entornos en los que te sientas tranquila puede anularlo por completo. Con un poco de aquí y un poco de allí puedes dar la vuelta a tu vida. Si lo necesitas, que no lo sé. Puede que no te encuentres en una situación tan desesperada como era la mía hace veinte años. Ojalá así sea. Si yo he salido, me encantaría que tú también pudieras. Este es el motivo principal que me mueve a escribir en este blog, grabar vídeos en el canal de YouTube Esperanza Bipolar y dirigir una organización que trabaja por la recuperación de las personas que sufren la enfermedad. Mi objetivo era la remisión y ya lo he alcanzado. Tú eliges el tuyo.