Estamos a punto de terminar un año, y, como siempre, con nuestras ilusiones puestas en el año que empieza. Los que han sufrido en el que terminan, deseando que el nuevo les traiga mejor fortuna. Los que han tenido un año con más glorias que penas, esperando que el 2011 siga siendo un año de bienestar. Bipolares que han sufrido su primera crisis, o desafortunadamente hayan perdido ya la cuenta. Bipolares que han conseguido superar el año de una forma estable y con un equilibrio que esperan poder mantener en los años venideros.

El año que comienza, después de colaborar con una asociación de pacientes bipolares durante los dos últimos, será un año de mayor dedicación. Cada día me siento con mayor ilusión para intentar ayudar a quienes sufren con el trastorno bipolar, como yo lo hice durante tantos años.

Espero y deseo que mis vivencias y mi situación actual pueda servir a todo aquel que comparta conmigo su tiempo, a través de este blog o en la asociación. Porque confío en que cualquiera puede superar el trastorno bipolar, como yo lo estoy haciendo. Porque, en realidad, yo soy sólo uno más.

Feliz Navidad