Este año han cambiado mis prioridades por necesidad y me siento bien. He hecho muchas cosas que no hacía antes y estoy contento de poder hacerlas sin mucho desgaste. Me pilló el cambio en buen momento.

Al principio mi prioridad fue mi salud. Cada vez hacía más cosas relacionadas con el trastorno bipolar pero siempre atento a mi salud. Si dejaba de sentirme bien, paraba o repensaba sobre cómo cambiar algo. Nunca perdí el foco ni abandoné mi ocupación durante mucho tiempo. Hace dos años que ya no necesito preocuparme por el trastorno bipolar porque las sensaciones físicas que alertan de los síntomas han desaparecido y sé detectarlas. Sé cómo lo hice y lo logré gracias a lo que he aprendido sobre la la neurociencia y el cerebro. Mis comentarios en este blog muestran detalles importantes sin entrar en el tema de la biología. Desde mi primer libro pensé en escribir de la forma más clara posible. Ahora me dedico a mi madre, Raquel y Roberto, Isabel y mis amigos. Esperanza Bipolar y disfrutar de la vida todo lo que puedo completan mis horas despierto.

«Depende del momento en el que te encuentres, las prioridades son diferentes. Yo he cambiado mi rutina por dos motivos principales. Si mis prioridades cambiaban, cambiaba mi rutina. Si perdía motivación en algo que estaba haciendo, dejaba de hacerlo para comenzar algo nuevo. Todos los cambios han estado orientados por mi necesidad de enseñar lo aprendido»