Ahora también me voy a dedicar a que hacer algo nuevo. Después de publicar un comentario en este blog, muchas personas me mandaron mensajes o escribieron en redes sociales para conocer otras personas con trastorno bipolar en su ciudad. Incluso en otros países donde yo no puedo hacerlo, como Argentina o Chile.
 
Hasta ahora no lo había hecho con nadie, a partir de ahora lo haré contigo si quieres. Se crearon dos grupos de Whatsapp que todavía están activos. Para mí es mucho mejor conocerse físicamente. Mi experiencia de los últimos ocho años me dice que la tecnología está muy bien, pero cuando no hay mejores alternativas. 
 
Hace poco puse en contacto a personas en Vitoria y Santander. En Bilbao, la asociación Esperanza Bipolar lo hace desde que empezaron las reuniones. Esperanza Bipolar ha permitido que muchas personas hagan amistad con otras. A la mayoría les sienta mejor que bien. He pensado que ayudar a que os conozcáis es una manera de regalar un poco de salud a más personas sin necesidad de dedicar un tiempo extra. 
 
Se acerca el fin de año y tengo muchas cosas que celebrar. Ya no tengo ni síntomas ni rastro de malestar. Ojalá tú estés en una situación parecida.