En el año 2009 compré una agenda. Empecé a escribir cosas nuevas que aprendía y me podían servir para dar forma a Esperanza Bipolar. Tiene notas desordenadas de libros que leí o ideas que luego puse en marcha.
Al escribir en mis agendas, empecé a ordenar mi vida. Escribía lo que me pasaba en el presente y lo que proyectaba para mi futuro, pocos recuerdos. Algún reto y varios gráficos. Mientras andaba por la calle, recordaba mi pasado. Pasado, presente y futuro han estado dando vueltas dentro de mí durante estos diez años. Ahora podría prescindir del pasado, pero lo utilizo para mostrarte cosas. Las agendas me mantenían centrado en lo que quería hacer y me interesaba. Guardo todas mis agendas de recuerdo y algún día te copiaré alguna nota importante de ellas.
«Si te gusta escribir, puedes utilizar la escritura en tu beneficio. Si también escribes sobre lo que piensas, es mejor que si escribes sólo sobre lo que sientes. Tus ilusiones o proyectos son muy importantes. Al escribir cambiarás tu memoria y mejorarás tu capacidad de atención. Sin recordar, lo que sientes no cambia. Aumentando tu capacidad de prestar atención, aprenderás mejor y más rápido»