Hay algo que facilita mucho la vida. Tener libertad de elección y no verse obligado permite evitar el estrés si aparece. Eso no libera del estrés de lo imprevisible pero las opciones siempre dan tranquilidad.
Una vez leí que una persona conocida tenía plan A, plan B y plan C. Me imagino que eso es mejor que ir por la vida sin pensar aunque no estoy del todo seguro. Lo que sí te aseguro es que yo ahora pienso más las cosas que antes y me va mejor. Cada decisión que tomo va en la dirección de facilitarme la vida. Mi vida parece lo que no es, como la vida de cualquiera. Yo la vivo con tranquilidad pero a otras personas les habría explotado la cabeza con situaciones que he vivido con personas y amigos de Esperanza Bipolar.
He aprendido a no decepcionarme decepcionándome, y he aprendido a no tener miedo sintiendo, a veces, miedo. Cuando pensaba que todo dependía de mí, además de estar equivocado, vivía todo con una mayor tensión interna. Ahora pienso que veo la realidad con mayor claridad aunque también sé que estoy condicionado por mis «gafas». La gafas de todos tienen dos filtros: el filtro del miedo y el filtro del deseo. Ahora deseo menos y tengo menos miedo. En definitiva, veo mejor.
Fui con mi madre al cine y me gustaría repetir porque la vi disfrutar. No estoy para muchos esfuerzos, pero haré todos los posibles por mi madre. También por mi hija Raquel si los necesita. Y paro de contar. Dedico mi atención a más de veinte personas que no pertenecen a mi familia y el resto a pensar en el futuro de Esperanza Bipolar. Visto lo visto, Esperanza Bipolar parece ser lo más eficaz para muchos. Más de dos años con fármacos me parecen suficientes para que una persona mejore. Es una opinión no profesional pero no me parece muy eficaz que hagan falta más de diez años para dar con un tratamiento eficaz. Me parece curioso que no se hable de años de terapia. Ahora algún psiquiatra dice que la eutimia como tal no existe. Es como si un chino renegara de su propio idioma. Aunque me imagino que simplemente quería decir que la estabilidad sin fármacos no es posible. Hablar claro es más fácil para no confundir.
Construyo mi futuro aunque no sé dónde ni cuándo terminaré con lo que hago. Sólo me queda una cosa muy importante por hacer que la tengo programada para mi última etapa. El mundo no va a cambiar con mi conocimiento, por suerte o por desgracia. La pirámide de la ciencia tiene menos años que las pirámides de Egipto pero pesan lo mismo. Me encanta la ciencia y sé de sus ventajas. Gran parte de lo que sé se lo debo a la ciencia, no lo olvidaré nunca. Aunque lo más importante se lo debo a las horas dedicadas a derretirme las neuronas.
«Con libertad, puedes cambiar si lo necesitas. El estrés aparece cuando necesitas un cambio y no puedes hacerlo ni dentro ni fuera de ti. Los motivos de supervivencia son los únicos que nos deberían obligar. Sin embargo, aguantamos muchas cosas sin tener una necesidad real de aguantar. Si te quitas lo que te puedes quitar, házlo. La pena es que sólo después de hacerlo te puedes preguntar por qué no lo hiciste antes»