Hay quien recomienda llevar una especie de diario donde reflejar cómo te sientes con trastorno bipolar. Yo no lo he hecho nunca, pero escribir una vez a la semana en este blog no deja de ser una forma de hacer lo mismo aquí en los últimos años. Como me imagino que puedes no haber leído todos mis comentarios, voy a resumirte cómo me he sentido desde que tengo treinta años. A esa edad tuve mi primera depresión.
Durante los seis años siguientes, sufrí un episodio psicótico grave que supuso mi ingreso en un hospital psiquiátrico. Tres años después tuve las mismas sensaciones que preceden a un brote psicótico y pasé por otro ingreso forzoso de nuevo en el mismo hospital. Estas mismas sensaciones se repitieron con menos intensidad otras cuatro veces en los últimos años y me alegro de haber aprendido a evitarlas. Tengo sensaciones muy positivas después de haberme encontrado en situaciones que hace años me hubieran desbordado. Hoy puedo afirmar con tranquilidad, que es el primer año en mucho tiempo que no tengo ningún síntoma ni ninguna sensación fuera de lo que se puede considerar como normal. A partir de ahora contaré los años con una ilusión especial. Estoy muy satisfecho porque no he tenido que parar ni dejar de hacer nada de lo que llevo haciendo en los últimos años relativo al trastorno bipolar. Esperanza Bipolar crece con un tercer grupo y ya no depende todo de mí.
Un mañana me dediqué a escribir en una hoja mis peores años. En las situaciones que peor acabaron me encontraba sometido a distintas presiones. Al principio fueron profesionales, otras fueron personales y tuvieron que ver con mi entorno familiar más cercano. Aunque mi vida ha cambiado en muchos sentidos, yo he cambiado tanto o más que mi vida. En situación de remisió del trastorno bipolar sigo cuidándome mucho y teniendo muy presente todo lo aprendido hasta ahora. Mi vida ahora es fácil pero no pierdo de vista mis debilidades. Porque conocer tus debilidades es tu mayor fortaleza con trastorno bipolar.
Hay 5 comentarios en este articulo
efectivamente, conocer esas vulnerabilidades por las que se cuela y detectarlas a tiempo supone un gran avance en la profilaxis de este trastorno en cuestión, aún así he comprobado ésta última vez que se ha colado de manera muy sibilina cuando aún creyendo tomar todas las medidas preventivas el trastorno me ha tomado, como quien dice, al asalto...aún así ya conozco a este asaltante, sé de sus maneras y los que me rodean también y como no me falla su apoyo y vigilancia se evitan los ingresos, convirtiéndose en lo que vengo a denominar episodios domésticos que pueden ser contenidos "en la calle"....aún así la vivencia del trastorno no deja de ser intensa por decirlo amablemente, sin embargo ya cuento con una duración del mismo, comprobada, de veintiún días....a las tres semanas estoy aterrizado del todo y vivo este aterrizaje con un poco de pena también es cierto....y es que aún habiendo mucha angustia, también hay mucho disfrute
salud
Hola, soy Mane nuevamente. Con respecto a lo de conocer nuestras debilidades estoy totalmente de acuerdo contigo...es algo fundamental. Mientras más tiempo llevas con está condición, mejor conoces que es aquello que te hace mal y que puede denotar una crisis. Sin embargo, lo importante es que una vez que lo has identificado lo evites. A mi personalmente me ha costado aprender a evitar situaciones, personas, etc...pero afirmo que hacer lo dicho es lo mejor para tener una vida feliz y tranquila...a veces somos tan obstinados rechazando los consejos de quienes nos aman...en fin, son cosas que hay que trabajar.
Un gran abrazo.
Ps: disculpa por las palabras mal escritas. Se me hace algo más complicado cuando escribo desde el celular, letras pequeñas...lo importante es que se entienda.
Mane.
Como no te desenganches del disfrute, vivirás de nuevo la angustia. A mí no me compensa.
Gracias por escribir, Mane. Aquí queda escrito, hay mucho valor en tus palabras.