Casi todo en esta vida es cuestión de aprendizaje. Antes de empezar a sufrir los síntomas del trastorno bipolar no me preocupaba si me faltaba algo por aprender o no, desde que empecé a sufrirlos – hace más de trece años- me empecé a preocupar por aprender con el ánimo de encontrarme cada día mejor. Hoy es el día que me gusta aprender con la intención de ayudar a los demás a que cada día se encuentren mejor.
En realidad, hay tantas formas de aprender que, en este comentario, me voy a centrar exclusivamente en los libros. En los últimos siete años he leido alrededor de cincuenta libros, y de todos ellos he aprendido algo.Filosofía, psicología y otros libros difíciles de catalogar son la fuente de gran parte de lo aprendido, y gran parte de mi bienestar se debe a ellos. En realidad comencé a elegir en las librerías aquellos que pensaba me podían ayudar. Hoy necesito más de quince minutos para elegir un libro porque busco cuestiones muy concretas en las que me gustaría profundizar.
Un libro cuesta entre 6€ y 20€, lo que puedes aprender vale mucho más. Todos sabemos bastante bien de qué pie cojeamos, así que elegir no es difícil. Poner en práctica lo aprendido es otro cantar. Hay libros que me han dejado una única idea que puede valer media vida. Uno de mis mayores placeres es entrar en una librería, pasear en sus pasillos y ojear libros hasta que el dolor me lo permite.
Leer invita a la reflexión, y la reflexión es la antesala al cambio. La terapia psicológica es de gran utilidad en el tratamiento del trastorno bipolar pero no todos pueden acceder a ella. A un buen libro casi todos podemos acceder.
Te propongo lo siguiente. Haz un hueco en tu librería y esta tarde elige un libro para ti. Decía Tierno Galván, que los libros hay que leerlos como comen las gallinas; levantando la vista del libro de vez en cuando para reflexionar. Así lo hice durante muchos años, ahora me dedico a subrayar. No es necesario que sean libros específicos sobre el trastorno bipolar, ante todo somos personas y podemos aprender a dejar de sufrir. Con tiempo, paciencia y muchos libros 🙂
Se me había olvidado el espacio para compartir. Puedes dejar aquí un comentario con el libro que más te haya enseñado, y si quieres, qué es lo que te enseñó…
Hay 13 comentarios en este articulo
Los libros, algunos libros, son como planos de la realidad, jamás la realidad. Es fácil encandilarse durante su lectura, creer que son posibles los cambios y fácil su consecución. Estoy pensando en algunos libros de autoayuda que han caído en mis manos. Y estos libros no dejan de ser como el plano del viajero que va a emprender un viaje. Y el plano es lo que es, una aproximación a la realidad, una orientación, una posibilidad, jamás el territorio.
Pero mientras leía estos libros disfrutaba. Me encantaba que me dijeran que el cambio era posible, que tenía oportunidades y bazas con las que jugar la partida. Entonces intentaba aplicarme en el empeño y aunque algo conseguía, no terminaba por emprender ese viaje de una manera auténtica.
Teoría- práctica. Vistos de este modo me parecen muy separados uno del otro, sólo para concluir que se requiere mucho más de lo segundo que de lo primero. La teoría es como preparar un largo viaje, un viaje que sólo comienza cuando se da el primer paso.
El riesgo que hallo en saturarse de teoría es que uno no termina por emprender el viaje. Un viaje que cada cual ha de emprender por sí mismo, desde sus propias circunstancias, con sus propias posibilidades.
Como me apuntaron en un libro, acertadamente dedicado, puedo resumir con sus mismas palabras todo lo dicho anteriormente sobre lo que debe aportar un libro:
"Pensamiento, reflexión, acción."
Feliz lectura
Alberto, me resuena mucho tu reflexión acerca de la lectura de libros que proponen y describen modos de cambiar nuestros hábitos. En los últimos años casi dejé de leer ficción en la búsqueda de herramientas de autoayuda, de las más diversas. Cada libro es una esperanza, una linterna para el camino, que sólo uno recorre. Creo que esos momentos de goce y de recobrar la fe en que se puede estar mejor, valen por sí mismos. Modificar de un día a otro, teniendo sobre los hombros las cicatrices de nuestras crisis, no es cosa sencilla. Sin embargo creo que en seguir hacia adelante, cueste lo que cueste, es de lo que se trata la vida y estos faros encuadernados, que encontramos y nos recomiendan, la hacen más llevadera.
Dos libros que me han resultado muy significativos: La Danza de la realidad de Alejandro Jodorowsky y El poder del ahora de Eckhart Tolle.
Saludos.
El mejor libro del mundo para descansar el espíritu y para darle sentido a nuestras vidas es la Biblia y en ella aprendemoa a conocernos y a tener FE en DIOS. Los animo a que busquen en este valioso libro la esencia y el proposito de dios en cada vida. Bendiciones
Dios nuestro Señor, Salvador y Sanador. Amén
Alberto, es muy cierto que que algunos libros son el plano del viajero, pero todos sabemos a donde nos conduce, por ejemplo, el plano de un tesoro. Otros ni siquiera son planos, sino verdaderos descubrimientos que, con suerte, podrías necesitar una vida para aprender lo que te enseñan. Quizás es que yo era demasiado ignorante, pero a mi algunos puedo decir que me han cambiado la vida :))
Federico, "faros encuadernados" resumen muy bien el propósito de algunos libros. Del libro de Jodorowsky me hablaron hace algún tiempo pero aún no lo he leido. El de Eckhart Tolle sí y me gustó. Atento a un pasaje del libro: "Si estás soportando una pesadilla, tu motivación para despertar será más intensa que la de alguien atrapado en los altibajos de un sueño ordinario". No está mal, no? :)
La Biblia no es un libro que hable de lo humano, sino más bien de lo divino. Aunque sé que para muchos no es posible separarlo :)
Hola bueno coincido en muchas cosas con las que escribis. Yo tambièn soy bipolar y tambièn creo que cuestiones de sentimientos mi corazòn es muy o demasiado vulnerable . Tambièn leo mucho de todo...sobre Bipolaridad de Grecco, me encanta Javier Marìas, Carlos Ruiz Safòn, Gioconda Belli y tambièn como vos subrayo todas las oraciones o pàrrafos que me llaman la atenciòn. Muy bueno tu blog.
Todos los corazones son vulnerables, y es bueno que lo sean. Realmente, pienso que nuestros problemas no tienen tanto que ver con el supuesto exceso de "emocionalidad" o "sensibilidad".
A mi también me gusta Javier Marías, cuando retome la novela tengo tantos autores por leer... :)
El aprendizaje es algo elemental de la vida, día a día vamos aprendiendo cosas que nos ayudan con nuestra vida cotidiana y por tonterías que parezcan seguro que tienen algo de valor y nos enseñan algo.
Así es, Johan :)
Nada mal, por ahí alguna vez leí que la contracara del dolor es el amor en potencia que en algún momento dará frutos. De dolor písquico mucho sabemos.
En este invierno de moderada depresión, tener consciencia de que todo es pasajero hace que no se congele del todo el alma.
Saludos! (después de un par de años de ausencia por aquí.)
Así es, Federico. No conozco ningún bipolar que no sepa de dolor psíquico y haya aprendido algo por el camino. Y tú no vas a ser menos porque has aprendido a evitar que se te congele el alma. Un cálido abrazo por si te ayuda :))