Hoy estoy contento. Algunos psiquiatras se están modernizando y empiezan a recomendar a sus pacientes que eviten el estrés. Otros ven en la redes sociales una oportunidad para la salud y no una amenaza para su profesión. 
Me alegro de que se hayan dado cuenta de que no les va a faltar trabajo. En ese sentido son afortunados, aunque lo que tienen que ver de lunes a viernes no sea un buen menú del día. Yo hago lo que puedo cada quince días y, si tienes corazón, también duele. Si yo logro lo que algunos no pueden lograr, el corazón tiene mucho que ver. Ojalá todos los psiquiatras del mundo supieran lo que yo sé respecto al trastorno bipolar. La mitad dejarían de sufrir.

Esta tarde me voy a reunir con diez personas y voy a hacer lo que mejor sé y de la mejor manera que sé. Feliz fin de semana :))