Hace aproximadamente diez años que recibí el diagnóstico.»Trastorno bipolar» decía el informe médico en cuestión, y no tenía la menor idea de lo que aquello significaba, es más, ni siquiera me preocupé por averiguarlo.
Hoy es el día, y desde hace más de tres años que la palabra bipolar no significa nada para mi.
En realidad, sólo me trae recuerdos de situaciones vividas muy dolorosas que hoy en día sólo forman parte de mi memoria. Cada día que pasa, me siento más alejado de los síntomas, y aunque nadie puede asegurar un futuro libre de sufrimiento (ni siquiera, aquellos que no son bipolares), tengo la sensación de que cada día estoy más lejos de padecer el sufrimiento de sus síntomas.

Afortunadamente me siento emocionalmente muy estable y de alguna forma me siento un privilegiado porque conozco de primera mano la evolución de otros bipolares como yo, y sé que gracias a mi esfuerzo personal y una ayuda médica y psicoterapéutica muy profesional y eficiente me han devuelto al punto de partida.
Transmitir la esperanza de que un día vosotros también podréis dejar atrás el sufrimiento y los síntomas es el único objeto de este blog. Por supuesto, la aportación de todos vosotros, bipolares y familiares de afectados, tiene el mismo valor que cualquiera de mis comentarios. Al fin y al cabo, sólo me considero un bipolar más.